La imagen pertenece a amber down92.
Éstos 4 años a tu lado se han pasado tan rápido, que cuando me dí cuenta faltaba ya sólo un mes para que te fueras de México.
Ahora todo gira alrededor de tus preparativos para ese viaje: los papeles de la escuela, los últimos detalles de tu tesis, la cita para la visa, vender y/o regalar todas tus cosas, comprar algunas nuevas que allá saldrían demasiado caras, el boleto del avión...
Además, la gente no deja de recordártelo en todo momento:
-Oye, ¿ya cuánto falta para qué te vayas? ¿Ya estás lista? ¡Wow, pues mucha suerte!
Todo pasa, y mientras yo únicamente observo. Si antes podíamos escribir juntas esta historia, ahora me siento sólo como una espectadora de lo que es tu nueva vida.
Me has dicho que no lo tome como una despedida, sino como una motivación para superarme y poder alcanzarte allá, pero me conozco, no puedo asegurar nada...
Y con eso no me refiero a que daré por hecho que lo nuestro ya no pudo ser y que entonces me resignaré a quedarme por siempre aquí y por lo tanto tendré que buscar algunas novias nuevas, no, nada de eso: temo morirme de tristeza.
Anque dices que también para ti será difícil, tienes a tu favor que estás acostumbrada a ver una vez al año a la gente que quieres, vivirás por fin en Francia como siempre habías soñado, te vas con la ilusión de entrar a una nueva escuela para hacer tu maestría, conocerás gente nueva y por fin vas a vivir sola...
Yo me voy a quedar en mi casa, frente a la computadora, esperando que te conectes, que me mandes un correo, que te acuerdes de mi a pesar de lo ocupada que vas a estar...
No sé que voy a hacer, si me dolían tus viajes de un mes ¿Cómo voy a poder enfrentarme a tu ausencia durante todo un año? Además, debo confesar que dudo mucho que cuando regreses te quedes aquí por algunas semanas, como dices, pues he llegado a creer completamente en que tu paso por México sólo será de unas cuantas horas, únicamente para poder tomar el siguiente avión que te lleve con algunos de tus familiares y amigos.
Tus abrazos son lo único que puede consolarme cuando estoy mal, pero ya no podré recibirlos...
Y ahora que me doy cuenta de que sólo faltan 3 semanas, no puedo evitar sentirme horrorizada por ello, pues los años pasaron volando, y sé que en un pestañeo me encontraré más sola de lo que me he podido sentir jamás.
