¡Muy Feliz 2011!

La imagen pertenece a williamcho.

Dentro de unas cuantas horas no sólo habrá finalizado un año, sino toda una década. Por alguna razón, el termino de un ciclo y el principio de otro me siguen causando emoción, sí, a mi, que tanto me desagrada la Navidad y me gusta andarme quejando de todo.

Tal vez tengo esperanza en este nuevo año porque sé que van a pasar cosas que me harán muy feliz (como por ejemplo ¡voy a poder tener a mi novia de nuevo entre mis brazos!), algunas otras que representan cambios radicales, el hecho de que ya no ando tan antisocial y quiero conocer gente nueva, algunos proyectos que tengo por ahí, que pienso retomar y ahora sí, desarrollarlos (porque mi principal propósito para este nuevo año es terminar lo que empiezo, no hacerlo me ha jodido mucho).

A lo largo de esta década pasaron un sinfín de acontecimientos que cambiaron por completo mi vida, pues 10 años no son cualquier cosa. Este nuevo ciclo que empieza, llega en un momento en que de alguna forma las cosas se fueron acomodando y por fin, aunque casi a la fuerza, mucho de lo que siempre había querido va a convertirse en realidad.

Además, hablo de toda la década porque muchas veces parece que en sólo un año no hay tantos logros ni cambios en nuestra vida, por lo que el 31 de Diciembre puede parecer nada más otra fecha en que nos haremos promesas que no cumpliremos, jugaremos a creer en los ritos que prometen traernos suerte en el amor, el dinero, para salir de viaje; otra cena, más abrazos y felicitaciones... pero hasta ahí. Si tomamos en cuenta todo lo que hemos hecho durante este lapso de 10 años que termina hoy, podremos ver que definitivamente ni nosotros ni el mundo es el mismo.

En fin. Pues espero que la pasen muy bien esta noche, que el nuevo año traiga muchas cosas buenas para todos ustedes, que se cumplan sus deseos y que en un año, al mirar para atrás y recordar lo que pensaban sobre él el día de hoy, se den cuenta de que les fue aún mejor de lo que creían.

Y pues ¡A festejar! ¡FELIZ AÑO 2011!


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Feliz(?) Navidad...

La imagen pertenece a MattGrommes.

El título y la imagen de este post fueron algún día parte de otras entradas (una llevó el mismo nombre y otra la fotografía) que publiqué en dos blogs que alguna vez tuve. La navidad me parecía "triste" porque ya no me divertía igual que cuando era niña y porque no recibía nada, mientras todos mis primos y demás sí. También la odiaba por cosas tan estúpidas como la insistente pregunta de mis tías: "¿Ya tienes novio?" ... Hoy sé que nada de eso merecía tanta atención y que definitivamente "triste" no era la palabra correcta para calificarla.

Veo el árbol de Navidad de mi casa y me pongo a pensar en esos años en que adoraba esta época: cuando me tocaba pasarla en casa de mis abuelitos maternos. Recuerdo sobre todo un día, en que mi abuelito compró regalos para mi y para dos de mis primas (pues con ellas era con las que más me gustaba jugar). Me llevó hasta el árbol (que es el que ahora está en mi casa) y me dijo que adivinara cuál había elegido para mi. Yo tenía miedo de escoger, pues uno de los obsequios me había gustado mucho pero sentía que si no era el que él había comprado para mi, lo iba a hacer sentir muy triste, y no quería verlo así. Por fin, después de mucho y casi empezando a sentir culpa, le señalé el que más me gustaba. Él sonrío y me dijo feliz:

-Ese es el que elegí para ti.

Hoy iré de nuevo a su casa, pero en esta ocasión por primera vez sólo estará mi abuelita para recibirme.

Y ¿saben? prefiero omitir la razón por la que voy hoy en lugar de quedarme en mi casa, sólo les diré que pienso ir para recordar (pensativa y sola) los tiempos felices, y para acompañar a alguien que quiero mucho.

Al llegar, saludaré a los demás con una sonrisa hipócrita y luego los ignoraré el resto de la noche.

¿"Feliz" Navidad? No para mi, pero ustedes pásenla increíble.


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Anda, búrlate de mi, Facebook.

Son casi las 7:30 a.m. (ahora que empiezo a escribir) y no he dormido por andar en el Facebook. Oh, pero no es lo que creen, no; no es que me haya vuelto adicta y ahora me una a miles de grupos idiotas y comente las fotografías de todo mundo o sus estados con algún "jajsjjsjajsjsajaaja, que bien te ves/que buena frase", nada de eso: he pasado la noche buscando información sobre la vida de cuanta persona se me ocurrió (ex compañeros, ex amigos, ex etcéteras). Los resultados me han hecho sentir realmente mal.

Encontré desde las compañeras de la secu que ya tienen hijos hasta la ex de mi novia ya con todo y barba (creo que incluso ya lo había mencionado), pasando por las fotos de graduación de gente menor que yo, ex amigos míos que no se soportaban entre sí y ahora se aman y se adoran, alguna que superó la obesidad de 3er. grado y ahora es más delgada que yo, gente de cierto lado que no tiene nada que ver con algún otro conocido mío pero que resultan tener amigos en común, etc. Incluso di con una compañera que ahora es (según lo que leí en la entrevista que le hicieron) una de las mejores bartenders, y con el compañero con enanismo que según me habían dicho, ya se había muerto años antes de que se popularizara Facebook. ¡Carajo! Hasta la más estúpida del salón tiene 10 veces más amigos que yo!

Soy la única que ha desperdiciado su vida. Hoy me he dado cuenta de que lo único que tengo es este blog, y algo de esperanza de que mi mujer no se encuentre a alguien mejor (cosa muy cabrona tomando en cuenta como hasta los más tarados me han superado) y entonces sí, me quede sólo con mis letras.

T_T...


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Yo no creo en fantasmas, pero...

Hace dos días entré a cierta página (cuyo nombre prefiero omitir por aquéllo de que la gente empiece a creer que todas las propiedades están "embrujadas" y deje de rentar), pues estaba buscando una casita para pasar unos días con los amigos. 

Pensé en algo grande, bonito y con alberca. La idea de que fuera un lugar amplio era que asistieran más personas (y saliera más barato, cof, cof...), así que me enfoqué en las casas de varias habitaciones. Fue así como llegué hasta una (cuya ubicación tampoco revelaré), y estuvo a punto de convencerme, cuando noté cierta figura en la chimenea: 

La imagen pertenece a la página que renta la casa.  La edición  fue hecha por mi (obviamente).

Definitivamente quedó descartada, pues aunque no creo en cosas sobrenaturales, soy bien miedosa y en la noche seguro me habría acordado. Bueno, eso y el precio.

Cierto pariente mío tiene una casa de campo enorme, con alberca, canchas de basketball y volleyball, asador, una especie de palapa para comer al aire libre, árboles frutales, actividad paranormal, etc. Si quisiera eso, se la pedía prestada, pero no, gracias. De hecho lleva años abandonada, pues incluso ya estaba vendida y el nuevo dueño la regresó. Prácticamente todos los que se han quedado aseguran haber tenido alguna experiencia, desde el perro aterrorizado que se negaba a entrar siquiera a la propiedad hasta apariciones fantasmales que emiten luz y hacen ruido.

La verdad yo jamás vi nada, pero la sugestión puede ser canija.


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Esas pinches frasecitas...

Una lista de frases que en su momento me sacaron de onda:

Una vez, hablando con Z. por teléfono, le comenté que había conocido en Internet a un güey que estudiaba en el Tec de Monterrey y que tenía un cuerpazo. La verdad a mi no me interesaba en lo absoluto, pues sólo tenía ojos para ella (cosa que Z. no sabía, of course). El chiste es que el chavo éste me invitó a jugar gotcha con él, y cuando le conté y le dije que no pensaba ir porque en ese momento no tenía ganas de un ligue buga, ella se apuntó enseguida. Sus palabras fueron:

Z.: -¡Ya sé! Yo me hago pasar por ti y voy... espera, ¿ya le dijiste como eres?
Yo: - ¡Ups! Sí, ya le dije... 

(Ella es morena y yo soy blanca)

Z.: -¡Ay, no! Y de seguro ya le dijiste que tienes los ojos verdes
Yo: -¿Qué?

En ese entonces teníamos como 11 años de conocernos, los últimos 4 siendo "mejores amigas", y nunca se había dado cuenta de que no tengo los ojos verdes. De hecho estuvo como 15 minutos insistiendo en que si eran de ese color y hasta le fue a preguntar a su mamá. Snif.

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La última vez que fui a Six Flags (Enero 2006) no me subí casi a ninguna atracción, pues quería estar con mi novia de ese entonces, quien después de subir al Kilauea y al Batman the Ride decidió que no quería ir ya a ningún otro juego. 

Estuvimos cuidando las cosas de los demás toda la tarde (como suelen hacer las señoras y los más losers de los grupitos que van al parque), y como apenas teníamos un mes saliendo y pocas cosas en común, la verdad la plática ni estaba tan buena. 

Cuando ya empezaba a oscurecer, quise ponerme un poquito más cariñosa, pero pues la cabrona no se dejaba. Me puso el pretexto de que había demasiados niños, y aunque ni pasaban casi por donde estábamos, la dejé en paz. Después de un rato, como nunca habíamos fajado siquiera (pues siempre andábamos en la calle y se iba temprano a su casa) quise sacar el tema, pero pues me fui un poco más lejos con mi pregunta:

Yo: -Oye ¿Y no te gustaría ya tener tu primera vez? (guiño, guiño)
Ella: -Ay, pues sí me dan ganas, pero me da miedo quedar embarazada...
Yo: -Em... ok.

La chavita era fea como ella sola y además estaba medio tartamuda, pero pues yo tenía 2 años sin nada de nada. Como una semana después terminamos.

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Recuerdo muy bien a mi primera novia. Ha sido la única capaz de lastimarme una y otra vez, pero pues yo era nueva en eso de las relaciones amorosas. Me pisoteó hasta el día en que me dejó plantada, y como eso es algo que a nadie se lo aguanto, jamás volví a buscarla. Bueno, supongo que eso era lo que quería, porque después ya no supe nada más de ella.

Recuerdo una de las últimas veces que hablamos, en la que me decía que estaba muy confundida, que si me quería, pero que no nada más a mi, que había otras personas...

Yo: -¿Otras personas?
Ella: - Sí, bueno, es que mi corazón está dividido en 7...

Jo, esa vieja se merece un post aparte.

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Otra de Z. : La penúltima vez que la vi, quise pedirle disculpas por cierto error que había cometido. Ella se mostró totalmente inflexible, me dijo que no necesitaba de mi amistad y que la dejara en paz. Dio la media vuelta y se metió a su casa. Supuse que eso había sido todo y me fui. Al día siguiente sonó mi teléfono: era ella.

Yo: -¿Bueno?
Z. : -¿Mambis?
Yo: - Sí...

¿Acaso no se suponía que ya no quería saber de mi? Estaba realmente intrigada con su llamada.

Z. : -Güey, préstame $200.00, es que quiero ir al salón a cortarme el cabello, pintármelo de rojo y alaciármelo... es que mi mamá no tiene dinero blah blah blah blah blah... blah blah...

¿Qué putas? Independientemente de mi amistad ¿a mi dinero si lo quería?

Yo: - No tengo dinero.
Z. : -¿Cómo no? ¡Yo he visto que tienes un cajón lleno de billetes!
Yo: - Pues ya no tengo, ya me lo gasté todo.
Z. : - No es cierto, lo que pasa es que no quieres prestármelo...

Cuando colgamos me quedé bastante sacada de onda, creí que estaba loca... al día siguiente lo comprobé. Fue hasta mi casa, con su nuevo look y con una amiga que ni habló, para pedirme dinero otra vez, ahora para sus pasajes de la semana. Le regalé $30 y jamás la volví a ver.

Creo que Z. es una de las personas más peculiares que me he topado a lo largo de mi vida, por lo que seguramente la seguiré mencionando en este blog. Y como aclaración, no, ya no siento nada por ella, escribo porque su comportamiento da para bastantes entradas, todo sea para entretenerlos a ustedes.

Ah, y por cierto, ya pueden poner emoticons en los comentarios. Tardé porque no me convencían ningunos y los que me gustaron no eran del color que yo quería, así que tuve que hacerlos de nuevo. Para ello utilicé el método que postée hace un tiempo, y la mayoría están basados en éstos de Sinister-Starfeesh. Espero que les gusten.


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